Rigel en... ¿USA?

Volví a Inglaterra tras pasar una semana en Coruña viendo aspirantes a los Oscraps. Me lo pasé en grande viendo a los viejos amigos, charlando con ex-profes de la universidad y zampando lo que no se encuentra en Inglaterra.

Las vacacione estas fueron estresantes para mí. Justo antes de salir decicí empezar a buscar un nuevo trabajo. Uno de los sitios a donde escribí fue a ATI/AMD aunque sabía que no tenían ninguna vacante abierta. Me sorprendió un manager de ATI respondiendo al día siguiente diciendo que trataría de abrir un puesto para poder contratarme. Intercambiamos algunos emails y finalmente el jueves me llamó por teléfono. Estuvimos hablando una hora, principalmente él respondía las preguntas que yo le iba haciendo sobre cómo es la forma de trabajo en ATI. Por supuesto ambos estamos bajo contratos de confidencialidad, de modo que nunca podemos entrar en detalles. Aun así fue suficiente para que ambos quedásemos a gusto.

Justo tras esto me llamó el responsable de recursos humanos pero para entonces yo ya había apagado el móvil porque necesitaba darme una ducha. Al acabar y volver al ordenador vi el email que me había escrito y le llamé usando Skype. La conversación fue algo así (no exagero):

Rigel: Hola, soy Men Ganito de Tal.
RRHH: Ah, ¡hola! He estado hablando con Pepito Palotes [el que va a ser mi jefe]. Dice que quieres empezar a trabajar en Enero... uhm... eso es demasiado tarde. Queremos que empieces el uno de Noviembre.
Rigel: Uff... es difícil porque tengo trabajo a medio hacer y me gustaría dejarlo terminado antes de irme.
RRHH: Imagina que yo pudiese ofrecerte algo para que empezases en Noviembre. ¿Lo harías?
Rigel: Hombre, pues podría ser. ¿En qué estás pensando?
RRHH: Digámoslo así: ¿cuánto dinero te puedo ofrecer para que empieces a trabajar el uno de Noviembre?
Rigel: [flipando] Pues, ehm... que difícil me lo pones.
RRHH: Me dijo [tu futuro jefe] que te quiere para ya mismo y que te convenza para traerte pronto. Me ha tocado el papel de poli malo. Sólo tienes que decirme una cifra. Lo que quieras.
Rigel: [flipando más aún] Ehm... para empezar no estoy familiarizado con los sueldos estadounidenses, sino con los ingleses.
RRHH: No te preocupes, dime el sueldo que quieres en libras.
Rigel: Pues... [mucho más de lo que gano ahora]
RRHH: Eso en dólares es XXX, ¿no?
Rigel: Correcto.
RRHH: Sin problemas. Te llamaré mañana con una oferta que como mínimo será esa cifra. ¿De acuerdo?
Rigel: [Pensando "¿Esto es una inocentada o qué?"] Ehm... vale.

La conversación duró menos de diez minutos. Al cabo de unos días me manda un correo diciendo la oferta definitiva, que era [mucho más de lo que gano ahora] + 15%. Pos fale, pos fueno, pos malegro. Yo convencido ya de que el contrato incluiría una cláusula sobre darles a mi hijo primogénito.

A partir del 12 de noviembre estaré trabajando desde casa durante cosa de un año y luego tendremos que mudarnos a los alrededores de Boston, en la zona noreste de los EEUU. El equipo donde estaré es el de dispositivos móviles, así que nada de pedirme drivers de contrabando que no los tendré.