¿Está el Universo diseñado para que los humanos vivamos en él?
Últimamente estoy leyendo libros sobre filosofía, espiritualidad y su relación con la ciencia. Dos de estos libros comentan un hecho científico muy curioso: parece ser que si las constantes que aparecen en las leyes de la física fuesen tan sólo mínimamente distintas, los seres humanos nunca podrían haber existido. No sólo eso, otros valores del Universo, tales como la masa total del mismo, también deben tener un valor muy preciso o de otro modo tampoco existiríamos. Hablamos de desviaciones ínfimas: una parte por 10^120 en el caso de la constante cosmológica.
Una explicación posible es que Dios creó el Universo seleccionando con mimo el valor de estas constantes para permitir la vida en la Tierra. Piensa un rato sobre ello y luego continúa leyendo.
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¡Piensa, perra!
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Efectivamente, decir que fue Dios no explica una mierda. Es un ejemplo del argumento por ignorancia. No sabemos por qué {las constantes de Universo tienen este valor, el Sol un día desapareció (eclipse), la gente se muere}, por tanto lo que pasa es que Dios tiene un plan. Como los cylon, pero a lo grande.
No; si no sabemos por qué o cómo sucede algo, simplemente no sabemos. De la falta de conocimiento no se pueden extraer conclusiones, ni tampoco se puede usar como justificación para aceptar cualquier creencia comodín. Decir que fue Dios explica exactamente lo mismo que si decimos que fue Santa Claus. Mi favorito personalmente es el Unicornio Rosa Invisible. A pesar de ser invisible sabemos que es Rosa gracias a un acto de fe.
Además, ¿qué nos hace pensar que hay un creador que ha seleccionado los valores de estas constantes? ¿sabemos con certeza que sea posible que los valores de estas constantes fuesen diferentes? La física actual toma como entradas valores tales como la masa del electrón. Es incapaz de explicar hoy día por qué la masa del electrón es esta y no otra. Sin embargo, es posible que en un futuro se determine que la masa del electrón está intrínsecamente ligada con el valor de otras constantes y finalmente se no queden grados de libertad. Es decir, que se descubra que el Universo es como es porque no puede ser de ningún otro modo. Pero esto es solamente una conjetura de momenti.
Todavía hay más agujeros en el argumento teísta. Somos tan egocéntricos que lo primero que nos viene a la cabeza para justificar la existencia del Universo somos nosotros mismos. Dios ha creado el Universo. ¿Qué podría tener en mente...? ¡Ah, sí! Un simio sin pelo que vive en la corteza fría de una bola diminuta de hierro fundido que gira alrededor de una estrella del montón en la zona exterior de una galaxia sin interés particular.
Está tan justificada esa conclusión como la de que Dios lo que quería eran tomates cherry -- sin duda mucho más apetecibles que los humanos. O lombrices de tierra, o cristales de cuarzo. A lo mejor Dios lo que quería era pasar unas vacaciones en el Caribe. Los humanos le vienen bien para servirle cócteles. Son lo bastante inteligentes para preparar bebidas alcohólicas, pero no para darse cuenta de lo insignificantes que son en la inmensidad del Universo.
En general, preguntarse por qué se cumplen ciertas condiciones que son estrictamente necesarias para que podamos vivir es un ejemplo de una pregunta mal formulada. ¡Es que si no se diesen las condiciones para nuestra vida en la Tierra no estaríamos aquí haciendo preguntas estúpidas! En un planeta inerte como Venus no hay ningún venusiano preguntándose por qué las condiciones de su planeta no son compatibles con la vida. Es de una obviedad aplastante.
Dicho de otro modo, los teístas que usan el argumento de las constantes físicas para justificar sus dogmatismos lo único que logran es demostrar sus propias limitaciones mentales. Esto es casi una tautología; si fuesen capaces de razonar no aceptarían ninguna idea como acto de fe, sino que exigirían siempre demostraciones empíricas.